Cualquiera que se haya ofrecido como voluntario para entrenar a un aficionado o a un equipo escolar sabe lo que es que la gente le grite insultos o blasfemias. El ataque surge sin excepción como un ataque personal; como acoso e intimidación del entrenador voluntario. El hecho de que el entrenador esté dedicando habilidades y valioso tiempo personal a la organización claramente no es algo que el espectador considere.
La ICANN se nutre del voluntariado. Sin la dedicación y el sacrificio de las personas que apoyan a la ICANN, y su participación (a menudo como voluntarios) en el modelo de múltiples partes interesadas y el desarrollo de políticas ascendentes, la ICANN simplemente no sobreviviría. Algunos participantes incluso aceptan los desafíos de liderazgo, una elección motivada por el compromiso y activismo que mantiene viva a la ICANN. Ellos eligen convertirse en el "entrenador" del equipo. Han demostrado las habilidades y conocimientos para liderar y, generalmente mediante elecciones, se les ofrece la oportunidad.
¿Recuerdan al entrenador voluntario?
Este fenómeno plantea una pregunta muy interesante y discutible: ¿el liderazgo debería tener una coraza más gruesa? Bueno, hasta cierto punto, en mi opinión, sí. El voluntario/participante ahora se encuentra en una posición de autoridad y se espera que posea las competencias para manejar las críticas, el disenso, los cuestionamientos agresivos de las decisiones y muchos otros desafíos a su liderazgo. ¿Pero deberían verse obligados a tolerar y mitigar las críticas abusivas? ¿La negatividad? ¿Los comentarios contraproducentes, irritantes o frívolos? Creo que todos podemos estar de acuerdo en que la respuesta es no.
Dediquemos un momento para pensar sobre la crítica constructiva.
Crítica constructiva: crítica o consejo que es útil y tiene la intención de ayudar o mejorar algo, a menudo con una oferta de soluciones posibles (dictionary.com). Entonces, ¿cómo se da o se promueve la crítica constructiva? Creo que la respuesta está en la definición: " … útil … tiene la intención de ayudar … con una oferta de soluciones posibles".
No le estoy pidiendo a la gente que sean buenos con el liderazgo. Háganlos responsables de sus decisiones. Exijan transparencia. Hagan cumplir la aplicación de las políticas. Ellos comprenden el rol de liderazgo que han asumido y esperan que ustedes los hagan responsables de sus obligaciones.
Así que, antes de criticar sus acciones o decisiones, les pediría que consideren lo siguiente: háganlos sentir que quieren ser parte de una solución en lugar de ser simplemente un opositor. Cambien su percepción de sus críticas para que, en lugar de ponerse a la defensiva, se vuelvan receptivos y aprecien sus aportes.
Pero sobre todo, y esto no es negociable, trátenlos con respeto. Si ofrecen críticas constructivas en lugar de simplemente criticar, estarán tratando al liderazgo con respeto. Estarán desafiándolos legítimamente y al mismo tiempo les demostrarán interés en abrir una conversación con ellos sobre mejoras o cambios. Los comentarios deben centrarse en el problema, no en las personas. Ellos han sido elegidos para liderar, socavar ese liderazgo con meras críticas es algo destructivo. El objetivo de todos debería ser el éxito del equipo, el grupo, la comunidad y, en definitiva, el servicio de la ICANN para el mundo.
Por lo tanto, antes de hacer clic en Enviar, o antes de hablar, me gustaría que se pregunten algo muy sencillo: ¿Mi mensaje es respetuoso y constructivo?
Cumplan con las Normas de comportamiento esperado de la ICANN que solicitan "Respetar a todos los miembros de la comunidad de la ICANN por igual, comportarse de una manera profesional y demostrar un comportamiento adecuado"
